Si partimos del convencimiento que el juego es el mejor principio educativo, podría afirmar que jugar es la mejor forma de aprender, por lo tanto, aprender a jugar debería ser aprender a vivir.
El Fers, el Ajedrez de Colores nos ayuda a resolver problemas, a tomar decisiones, a aceptar las normas, a entender el sentido de la responsabilidad, pero también cada jugador mejora desde el primer día su atención y concentración, su capacidad de análisis, su razonamiento y entre otras habilidades cognitivas mejora su creatividad y su imaginación.
EL Ajedrez de Colores es una herramienta cognitiva para que los alumnos interpreten su personalidad, su condición, su relación con los demás y con ellos mismos, para que entiendan que ser diferentes es una oportunidad, para que comprendan como asumir lo que son y buscar sus oportunidades...
Este juego nos enseña que en el tablero de juego como en la vida, las circunstancias en las que no tenemos que desenvolver cambian cortantemente. El tablero del Fers puede cambiar, puede transformarse en distintos escenarios de juego totalmente diferente, permitiendo espacios de juego nuevos, por un lado adaptados a las características de lo jugadores y por otro, sorprendiéndonos porque justo antes de empezar la partida los contrincantes pueden crear un nuevo tablero de juego, totalmente desconocido hasta ahora por ambos, como sucede cada vez que salimos de casa sin saber lo que nos depara el futuro pero con la convicción de que estamos preparados para afrontar todo lo que surja, porque sabemos que las situaciones en las que tenemos que desenvolvernos cada día cambian continuamente, tenemos que ser capaces de utilizar bien las herramientas que tenemos, que hemos aprendido y que seguimos perfeccionado.
El Fers como la vida misma permite cambiar el terreno de juego, obligando a los jugadores a tener en cuenta el espacio, el tiempo, sus habilidades cognitivas y la utilización de los recursos disponibles para ganar la partida.
El Fers es un reflejo de nuestra sociedad actual, de nuestros valores de democracia, de igualdad entre todos los hombres, sin diferencias y con las mismas oportunidades, es un juego que representa un modelo más acorde con la sociedad actual en la que vivimos, donde enseñamos y transmitimos valores de superación y autorrealización, donde prima querer ser lo que queremos ser, sin que nuestro origen, naturaleza, raza, condición física o psíquica nos clasifique y nos señale la dirección que debemos seguir el resto de nuestras vidas.
El marco teórico y filosófico del Fers ejemplifica una sociedad actual moderna, las casillas configuran un mundo cambiante lleno de oportunidades, en las que cualquier persona (peón) sea como sea, puede aprender a desarrollar todo su potencial participando e interactuando social y activamente en su comunidad.
Utilicemos entonces el FERS para transmitir al mundo entero que la INTELIGENCIA, LA CREATIVIDAD y la ORIGINALIDAD (el progreso), la IMAGINACION (distinción humana), el EQUILIBRIO (la naturaleza) y la JUSTICIA y EL RESPETO (el conocimiento), son y deben ser conocimientos y habilidades aprendidas y entrenadas, a través del JUEGO; para poder utilizarlas habitualmente en la vida de todos y cada uno nosotros, para conseguir que nuestro mundo se llene de GENIOS, que puedan construir un futuro justo, lleno de oportunidades, las mismas para todos, donde la diversidad no nos diferencie y donde el progreso esté en equilibrio con nuestras vidas y con todo lo que nos rodea.
Podemos mejorar nuestras inteligencias, para que nos ayuden a conocernos mejor y a desenvolvernos mejor en la vida actual.
Un genio ni es blanco ni es negro, ni alto ni bajo, un genio no nace, se hace… jugando con mil amigos, jugando con cien maestros.